Si hay dos caminos, podemos elegir que hacer con nuestra ira.
¿qué puedo hacer para prevenir la ira?
La ira aparece como respuesta a situaciones en las cuales cierto estímulo activa patrones inconscientes. Por tanto, es necesario trabajar buenos hábitos que permitan conscienciar y transmutar aquellos patrones.
antes que la situación ocurra
Cultivar la serenidad y la habilidad para reconocer la ira y transformarla. Técnicas como el yoga, la meditación, la relajación… pueden ayudarnos. Aprender a comunicar nuestras necesidades de forma asertiva y empática también.
¿qué lección esconde esta situación?
Las situaciones que llegan a nuestra vida son oportunidades para aportar luz y consciencia sobre algún aspecto a mejorar. Aunque existan tendencias inconscientes, siempre podemos decidir nuestra respuesta.
mientras ocurre
Tomar consciencia de lo que está surgiendo, intenta relativizar, tomar perspectiva, distancia. Enfocar la atención en la propia respiración puede facilitarlo: inspirando reconozco mi ira… espirando la abrazo…
¿qué hemos aprendido de esta situación?
¿Cuál es la raíz de nuestra reacción? Aquí está la clave: en la reflexión que nos permita mejorar la forma que encaramos estas situaciones. Por ejemplo: La ira puede estar
- poniendo de relieve que estamos traicionando nuestras necesidades, deseos o valores
- ocultando la tristeza de una pérdida: algo a lo que nos aferramos y no somos capaces de soltar
- ser la tapadera de la olla a presión en la que nos hemos convertido por nuestra incapacidad de poner límites a una situación que nos incomoda
- … (anota aquí tu reflexión)
después de ocurrido
Integrar el aprendizaje a través de las acciones necesarias. Por ejemplo:
- Aclarar que necesidades, deseos o valores no estamos dispuestos a traicionar, definir límites si es necesario
- Determinar aquello a lo que nos estamos aferrando para agradecer y soltar
- Aprender a expresar nuestra incomodidad, cuanto antes mejor, para evitar llegar al punto de ebullición
- … (anota aquí tu aprendizaje)
Si nuestras palabras o actos hirieron a otra(s) persona(s), compartimos nuestro aprendizaje.
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referencias
“La ira es una función vital que tiene mucho valor porque nos despierta y nos suministra intensidad para actuar. Se ha de respetar su energía y se debe utilizar con todo su poder, es decir, para servir a nuestras necesidades y no con el objetivo de atacar a los demás” (Cuaderno de ejercicios de comunicación no violenta de Anne Van Stappen)
“Las cosas son como son, no como nos gustaría que fueran. Nunca podremos hacer nada por cambiar las circunstancias, pero siempre podemos elegir nuestra actitud” (El efecto actitud de Victor Küppers)
“La ira es como un bebé que berrea, sufre y, llora. El bebé necesita que su madre lo abrace. Tú eres la madre del bebé, de la ira que surge en ti. En el momento que empieces a practicar el inspirar y espirar de manera consciente, tendrás la energÌa de una madre y podrás acunar y abrazar a tu bebé. Limítate a abrazar la ira que sientes, inspirando y espirando; no necesitas hacer nada más. Y el bebé se sentirá mejor en el acto.” (La Ira, el dominio del fuego interior de Thich Nhat Hanh)
“La ira necesita ser escuchada; es una voz, un grito, un pedido, un ruego. La ira debe ser respetada. ¿Por qué? Porque es un mapa que nos muestra cuáles son nuestras fronteras, que nos muestra adónde deseamos ir. Nos permite ver dónde hemos estado y nos hace saber cuando no nos gustó.” (El Camino del Artista de Julia Cameron)
el origen
Mientras hacíamos nuestros ejercicios de comunicación no violenta, encontramos la siguiente invitación: “Dibuja lo que crea tu mente cuando estás lleno de ira o muy nervioso”
La ira como energía
Después refinamos el concepto con el siguiente esquema:
La ira es una energía que puede llevarnos hasta las estrellas o puede estrellarnos antes de despegar
El poder de la ira es muy grande, y si sabemos ponerlo a nuestro servicio, con una acción positiva, nos impulsa hacia adelante.
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